La Gingivitis es la enfermedad más prevalente de las encías en nuestra población. Se manifiesta por lo general cómo inflamación parcial o total de las encías, cambio de coloración de un rosado pálido (“Rosa coral”) en estado natural a un rojo más intenso según el grado de la enfermedad, pérdida de la forma; desaparecen los triángulos naturales que existen entre dientes y son reemplazados por papilas abombadas y redondas, puede haber mal aliento asociado al signo más claro de esta enfermedad: el sangrado.
¿Qué gatilla su aparición? Existen los factores genéticos para los cuales no hay mucho que podamos hacer, hay encías más sensibles, de perfiles más finos, que son más propensas a generar Gingivitis. Malos hábitos cómo la Onicofagia (Morderse las Uñas), interposición de elementos duros, uso de mondadientes, cepillado traumático (mala técnica) o con elementos no adecuados, tabaco, diabetes también van a alterar nuestras encías, pero sin lugar a dudas el dependiente número 1 de la salud de nuestra boca, y para el caso, de nuestras encías es el cepillado dental y la higiene.
Con una correcta técnica de higiene proporcionada por tu odontólogo tratante en Eudent, en dónde se señale correctamente el cómo cepillar y cuantas veces en el día, la sumatoria de aditamentos principalmente el hilo o seda dental, co-ayudar con limpiador lingual para controlar la carga bacteriana y/o colutorios (enjuagues bucales) son el método de mayor éxito para prevenir o curar la Gingivitis. Porque una “gracia” (si se le puede considerar) de la Gingivitis es que es reversible, es decir, podemos tomar las riendas de nuestra salud oral, combatirla y ganarle. ¿Te quedarías tranquilo si de pronto te empezara a sangrar un ojo? Seguro que no, y con tus encías debería provocarte lo mismo. No es sano convivir con un sangramiento constante o recurrente, aunque sea localizado. Escucha los llamados de atención de tu organismo, y ayúdalo cuando te lo pide.
Si no tienes claro si lo tuyo es Gingivitis, o a que se debe para tu caso en particular, siempre recomendamos un análisis para el cual te dejamos cordialmente invitado(a).
¡Cuídate hoy, no esperes a mañana!
